Descripción

Desde la Nada surgen todas las frecuencias, las posibilidades. Cómo armonizar con el mundo de la percepción para sutilizarlo y usarlo para saber lo que no somos. 

 

 

 

 

 

 

El mundo de la percepción es percibido por los sentidos. Estos sentidos embotados nos hacen ruido, nos asustan con sus percepciones violencias groseras expresadas o camufladas evasoras.

El alma, la identidad vive en el mundo de los colores, los sabores, las formas, los olores, los sonidos. Podemos quedarnos asustados o embelesados. Corregir la distorsión nos generará un estado donde podremos ver el horror sin horror y ver la belleza sin apego e iremos asumiendo la Nada del espíritu.

Lo descubrimos?