Ante un bebé, le deseamos amor, felicidad, alegría y todos los deseos que mayoriatariamente se desean en Navidad.
Son igual como letras de las canciones que versan: «sin ti no puedo vivir», «sin ti no soy nada», » si tu te vas, me muero», » eres lo más para mi».
Los primeros mensajes son de un adulto hablándole a un bebe, proporcionandole seguridad, tranquilidad, tratando de que el paso de autosuficiencia dentro de la madre hacia fuera, sea la transición más gradual; y los segundos mensajes son los de un bebé a un adulto para que le satisfaga sus necesidades.
Y después de estos mensajes iniciales, como sigue el vínculo?, aquí empieza la aventura de como tapar, llenar o asumir el vacío existencial, que es la vida misma.
La mamá después de la alegría de mostrar a su bebé se queda con todas las incertidumbres y esa alegría y felicidad han quedado en las fotos..
Un momento inicial idealizado igual , se repite en el enamoramiento, que todos festejan el nacimiento de un bebe como el nacimiento de una relación, pero donde están los mensajes de transición a estados imprevistos, altibajos, desbordantes y oscuros?
En contraposición a los luminosos, divinos y absolutos están los mensajes oscuros, que también abundan » los hijos son una carga», » ahora son todo complicaciones» ya tienes pareja, pues ahora a aguantar», » hombre casado, hombre cazado», » el amor hace sufrir», » cuanto más aguantas, más fuertes eres», «envejecer es perder»…
Y si tenemos idealizado el nacimiento, tenemos también idealizada la muerte.
Ante un moribundo se tiende a la actitud infantil del nacimiento, » que no te preocupe, que cuando te pongas bien vamos de fiesta»,» que todo bien, que duerme, come, que no llores»,» que calle que no sabe, ya no toca».
Y entremedio de la vida y la muerte, qué? Y ante la muerte y ante la vida, qué nuevas abordajes?
Está muriendo este año 2018, cómo intimamos con lo sucedido en este año, cómo tomamos sus alegrías y sus dolores, sus desafios ? y pronto empezará el nuevo año, estamos con los festejos infantiles, de los inicios, de la novedad, cómo tomamos y recibimos este nuevo crédito de vida, asumiendo las pata-aletas, los proyectos, cómo los aprovecharemos?
Cómo asumimos este constante renovación día a día, que viene desde antes de nacer y tiene su desarrollo en cada uno de nosotros y sigue después de la muerte?
Un Desarrollo de In-Madurez